lunes, 12 de mayo de 2008

La primera guitarra de Brian Jones VI


Recuerdo haber leido hace varios años una noticia sobre dos arquitectos italianos que fueron detenidos por falsificar sellos. En realidad, durante mucho tiempo a lo que se dedicaron fue a inventar y diseñar sus propios sellos enviando toda su correspondencia con ellos. Fueron condenados por algún tipo de fraude.

Muchísimo tiempo antes, a Duchamp se le ocurrió colocar un urinario en una sala de exposiciones. Ha sido declarada como la obra más influyente del siglo XX. Y es que a veces la frontera entre el arte y el crimen es difusa.

También a veces resulta dificil distinguir entre el amor y cualquier sentimiento.

4 comentarios:

EL CHICO GRIS dijo...

Los tíos le echaban imaginación. Seguramente el estado diga que le echaban más bien morro, ¡que qué es eso de no pagar!

Distinguir es difícil, porque normalmente nos atañen directamente y metidos directamente en el torbellino de sentimientos y con la cabeza a medio gas y subjetivizando, se nos hace complicado razonar.

Bardamu dijo...

Sí, quiza el problema sea razonar lo que no se atiene a razones. Tampoco vale echarlo a cara cruz. Una pena.

Anónimo dijo...

Una anécdota:
Un día, por pura curiosidad, se me ocurrió escribir una carta y echarla al correo. En lugar de sobre usé un trozo de papel reciclado envolviendo los folios y, en la esquina donde debían ir los sellos escribí:
"Señor cartero: Lo siento mucho pero en este momento no tengo dinero para el sello, podría hacer llegar esta carta a su destino?, en la próxima que escriba prometo poner el doble de franqueo"...
La carta llegó a su destino :)

Cafeína dijo...

Hay artistas q se han hecho famosos de modo casual por "osar" hacer algo diferente. La cuestión es intentarlo.