Las conversaciones en los bares dan para mucho y, en mi cabeza, nada es en vano. Aclarar el respeto y el cariño que siento por la persona/personaje (nunca he sabido distinguirlos muy bien) de mi interlocutor, que influye y no poco.
Reconozco que de Mariscal sólo conocía a Cobi y los cuchillos del país. Después de esa charla he buscado cosas de él y... Bueno, entiendo lo que me querían decir: ese toque infantil tiene su punto.
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