sábado, 20 de septiembre de 2008

Se me va


No soy persona de muchos caprichos, pero cuando me apetece algo, me apetece, y la vida me ensañe que no puedo pensármelo dos veces. El último antojo son unas Converse azul turquesa. Llevaban todo el mes en el escaparate, el útimo par y de mi número a 19,99 €. Me decido a comprarlas (las únicas playeras que tengo me las dieron de publicidad y están rotas, tampoco pido tanto), entro a la tienda sin verlas el escaparate (sospechoso), me acerco al mostrador y allí están; pregunto por ellas y me dicen que las acaba de comprar un cuarentón que todavía ando mirando por la tienda.

La cosa no tendría importancia de no ser porque es la tercera vez que me pasa. Las dos anteriores fueron con un abrigo y con un tocadiscos. En fin, seguiré con mis zapatos gastados y mis botas de lluvia.

miércoles, 17 de septiembre de 2008

Flor de otoño

Me resisto a que empiece el otoño, a que los días sean cada vez más cortos, las faldas y las mangas cada vez más largas, la ropa más oscura, el tiempo menos libre y más frio, a que se caigan las hojas, a que empiece la liga, el colegio...
Pero me encantan la vendimia y las castañas asadas, qué le voy a hacer. También he descubierto que el mosto rojo y la ginebra combinan muy bien en esa época del año y que las fiestas son cada vez más íntimas, privadas y menos confesables.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

R says

R dice que ver crecer a las plantas es mejor que tratar de cambiar a las personas; que amar a un enemigo es mejor que querer a un hermano; que de entre todo lo que pudo salvar, se queda con lo que ha destruido.

R dice que no sabe elegir y por eso acepta a todo el mundo; que no es puntual porque el tiempo es lo que nos sobra.

De todo lo que R dice, pocas cosas son creibles, lo que no implica que sean falsas. Yo mantengo la fe en su palabra.